Lo siento, tu sitio lo ocuparé con alguno
Al ariano lo había visto por última vez el jueves 09, cuando cenamos con uno de sus amigos. Fue una situación inquietante. Allí, frente a esos dos hombres... me dí cuenta que voy por la vida diciendo que quiero tal cosa, pero luego siento deseos por tal otra... (
Quiero estar con el que quiero, pero ¿quiero al hombre con el que quiero estar?) Lo que en verdad conformará a mi corazón, es dificil saberlo... pero es fácil darse cuenta cuando algo no lo hará. Ese día mire al
ariano y escuche al imitador de Luis Miguel... y se me antojaron iguales... ambos me atraian de diferentes maneras, pero con ningúno quería más que eso. Bendigo esa situación porque me aclaró la imagen que tenía sobre el
ariano. Discutiendo allí de todo y nada, con el imitador de Luis Miguel llegamos a tratar hasta el tema del proceso militar. Me hirvio la sangre al escuchar la misma cantinela de siempre de que "
algo habrán hecho" (
los desaparecidos)... pero me abstuve de indicar que no son los torturadores quienes deben juzgar las acciones de los hombres. Siendo mi profesión una de las actividades prohibidas en esa epoca, me alterá que haya gente que diga "si no te metes, no pasa nada"... porqué para mi entonces es tarde... ya estoy metida.
Lo ví el jueves... y puse todo lo nuestro en stand by... el sábado 11 empezo la cuenta regresiva. Le había pedido yo un favor que era una bobería y él lo había olvidado. Lo contacte para avisarle que ya no era necesario (ni el favor, ni él) y me contesto 6 horas después aduciendo mal humor.
Ejem... esto me dejo de una pieza. Faltan aún 4 días para le pusiera punto final.
El lunes 13 me escribio, pidiendome de vernos en la semana. Acepte recien hoy 15... y este día fuí a rescatar de las ruinas lo que quedará. Él estaba en las nubes, como siempre, y no se dio cuenta de lo que allí se jugaba. Como tantas veces, hablo primero de él y luego de él nuevamente para recomenzar. Canto canciones tristes y como otras veces, me puse a pensar en los hombres que he conocido... en aquellos que miré apenas y no paso nada, en los que me enfrentarón para que pasará algo, en los que pusieron las cartas sobre la mesa, en los que las escondieron, en los que dijeron que estaba todo claro... pensé también en los hombres que amé. Lloré sin poder contenerme. Lloré quizás por vos, que lees estas lineas. Lloré. Él penso que lloraba... por él.
Nos despedimos no mucho más tarde, sin hablar de nada de lo que había ocurrido. Yo sabía ya que no querría volver a verlo y le lancé una sonrisa definitiva. Él no se dio cuenta de nada.
Yo pienso que, / no son tan inútiles las noches que te di. / Te marchas ¿y qué?... / yo no intento discutírtelo, lo sabes y lo sé. / Al menos quédate solo esta noche / prometo no tocarte / estas segura. / Hay veces que me voy sintiendo solo / por que conozco esa sonrisa, tan definitiva, / tu sonrisa que a mi mismo me abrió tu paraiso. / Se dice que / con cada hombre / hay una como tu, / pero mi sitio / lo ocuparas con alguno / igual que yo mejor lo dudo. / Por que esta vez agachas la mirada / me pides que sigamos siendo amigos, / amigos para que maldita sea, / a un amigo lo perdono pero a ti te amo, / pueden parecer vanales mis instintos naturales.... // Hay una cosa que yo no te he dicho aún / que mis problemas sabes que se llaman tú / solo por eso tu me ves hacerme el duro / para sentirme un poquito mas seguro / y si no quieres ni decir en que he fallado / recuerda que también a ti te he perdonado / Y en cambio tu dices "lo siento no te quiero" / Y te me vas con esta historia entre tus dedos // Que vas a hacer... / busca una excusa y luego marchate / porque de mi, no devieras preocuparte, / no debes provocarme... / que yo te escribire un par de canciones / tratando de ocultar mis emociones, / pensando pero poco en las palabras, / te hablare de la sonrisa tan definitiva, / tu sonrisa que a mi mismo, me abrio tu paraiso. [...]